Plazoleta de San Blas de Cusco
La Plazoleta de San Blas, también conocida como el barrio de San Blas, es un lugar muy acogedor para los turistas. Es uno de los barrios más antiguos de la ciudad, También es conocido como el barrio de los artistas, asimismo lo demuestran las galerías que tiene a su alrededor en la plaza. Hoy en día, este lugar es visitado tanto por los cusqueños como por turistas; la gran mayoría de los habitantes son artesanos, destacándose en el tallado de madera y la pintura. Es un rincón mágico de Cusco que combina historia, cultura y arte en un solo lugar. Ofreciendo una experiencia única que no puedes perderte al visitar Cusco.
Historia y orígenes de la Plazoleta de San Blas
Historia Pre-Inca del Barrio de San Blas
El barrio de San Blas, ubicado en Cusco, tiene una rica historia que se remonta a la época prehispánica, mucho antes de la llegada de los incas. Originalmente, esta área era conocida como «T’oqo-kachi,» que significa «el hueco de la sal.» Esta denominación hacía referencia a las características geográficas del lugar. Durante la época pre-incaica, este sector ya era habitado por comunidades indígenas que aprovechaban sus recursos naturales.
Posiblemente el Barrio de San Blas albergaba a miembros de la nobleza Inca y artesanos especializados que trabajaban apara al elite del imperio inca
Llegada de los Españoles y Transformación del Barrio
Con la llegada de los españoles en el siglo XVI, el barrio de San Blas experimentó una transformación significativa. Los conquistadores españoles renombraron el área en honor a San Blas, el patrón de los enfermos de la garganta y de los artesanos. Esta práctica de renombrar lugares y construir iglesias sobre antiguos sitios sagrados incas fue común durante la colonización, con el objetivo de facilitar la conversión de los indígenas al cristianismo.
La Iglesia de San Blas, construida en el siglo XVI, es uno de los monumentos más emblemáticos del barrio y se cree que fue edificada sobre un antiguo templo inca. La arquitectura de la iglesia y otros edificios coloniales de la zona reflejan la mezcla de influencias indígenas y españolas. Durante este período, San Blas comenzó a desarrollarse como un centro de artesanía, debido a la habilidad y creatividad de sus habitantes. Los artesanos locales se especializaron en el tallado de madera, la alfarería, la platería y la pintura.
Ubicación de la Plaza de San Blas de Cusco
La Plazoleta de San Blas se encuentra en el barrio del mismo nombre, a unos pocos minutos caminando desde la Plaza de Armas de Cusco. Este encantador rincón está situado en una colina, ofreciendo vistas panorámicas de la ciudad y un ambiente tranquilo y pintoresco. La ubicación estratégica de la plaza la convierte en un punto de partida ideal para explorar las calles adoquinadas y los talleres de artesanos que caracterizan a este barrio bohemio.
¿Qué ver y hacer en la Plazoleta de San Blas?
Aquí puedes disfrutar de una variedad de actividades que incluyen desde visitar la icónica Iglesia de San Blas hasta explorar galerías de arte y talleres de artesanos locales. La plaza también alberga eventos culturales y mercados al aire libre, donde puedes encontrar productos únicos y disfrutar de la vibrante atmósfera local.
Iglesia de San Blas y su arquitectura singular
La Iglesia de San Blas es uno de los principales atractivos de la plazoleta. Construida en el siglo XVI, esta iglesia es famosa por su púlpito tallado en madera, considerado una obra maestra del arte colonial cusqueño. La arquitectura de la iglesia combina elementos barrocos y renacentistas, y su interior está adornado con hermosos retablos y pinturas de la escuela cusqueña. La visita a esta iglesia ofrece una mirada fascinante a la historia y el arte religioso de Cusco.
Galería de Hilario Mendivil y familia
Hilario Mendivil fue un destacado artesano cusqueño, conocido por sus esculturas de figuras religiosas con cuellos alargados. La galería de la familia Mendivil, ubicada cerca de la plazoleta, exhibe algunas de las obras más emblemáticas de este artista y sus descendientes. Aquí, los visitantes pueden apreciar la habilidad y creatividad que caracterizan al arte popular cusqueño, además de adquirir piezas únicas como recuerdos de su visita.
Galería Olave
La influencia de la familia Olave y de otros artesanos en Cusco es evidente en el barrio de San Blas, donde los talleres y galerías exhiben una variedad de piezas artísticas que combinan tradición y modernidad. Estos artesanos no solo preservan técnicas ancestrales, sino que también innovan, asegurando que su arte siga siendo relevante y apreciado por las nuevas generaciones.
Antigua Casona San Blas
La Antigua Casona San Blas es un edificio histórico que ha sido restaurado para albergar un hotel boutique y un centro cultural. Este lugar combina el encanto de la arquitectura colonial con las comodidades modernas, ofreciendo a los visitantes una experiencia única. La casona también organiza eventos culturales y exposiciones, brindando a los turistas la oportunidad de sumergirse en la rica cultura de Cusco.
Colegio El Carmelo
El Colegio El Carmelo es una institución educativa ubicada en el barrio de San Blas. Fundado en el siglo XX, este colegio ha sido un pilar en la formación de jóvenes cusqueños. La arquitectura del edificio y su entorno histórico lo convierten en un lugar de interés para quienes desean conocer más sobre la educación y la cultura local.
Entorno y vida cultural
Vida y cultura en la Plaza de San Blas
La Plaza de San Blas es un epicentro de la vida cultural en Cusco. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de presentaciones musicales, ferias de artesanías y talleres de arte. Los artistas locales exponen sus obras, ofreciendo una ventana al talento y la creatividad que abundan en esta ciudad. La vida en la plaza es dinámica y siempre hay algo nuevo que descubrir.
Gastronomía y experiencias únicas
La Plazoleta de San Blas y sus alrededores ofrecen una rica variedad de opciones gastronómicas. Desde pequeños cafés y restaurantes que sirven platos tradicionales peruanos hasta bistrós internacionales, la oferta culinaria es diversa y deliciosa. Los visitantes pueden disfrutar de experiencias únicas, como degustaciones de pisco y clases de cocina, que les permitirán llevarse un pedacito de la cultura peruana consigo.
Datos importantes y recomendaciones
Para aprovechar al máximo la visita a la Plazoleta de San Blas, es importante tener en cuenta algunos datos y recomendaciones. La mejor época para visitar es durante la temporada seca, de mayo a septiembre, cuando el clima es más agradable. Se recomienda llevar ropa cómoda y calzado adecuado para caminar por las calles empedradas. Además, es aconsejable explorar la plaza tanto de día como de noche para disfrutar de su atmósfera única en diferentes momentos del día.
Recomendaciones para los visitantes
Visitar la Plazoleta de San Blas es una experiencia que no debe apresurarse. Tómate tu tiempo para explorar cada rincón, interactuar con los artesanos locales y disfrutar de la oferta gastronómica. No olvides visitar la Iglesia de San Blas y las galerías de arte para obtener una visión completa de la cultura local. Además, es recomendable llevar efectivo, ya que algunos vendedores no aceptan tarjetas de crédito.
¿Cómo llegar a la Plazoleta de San Blas desde la Plaza de Armas?
Llegar a la Plazoleta de San Blas desde la Plaza de Armas es sencillo. Puedes caminar unos 10-15 minutos subiendo por las calles Hatun Rumiyoc no olvides visitar la piedra de 12 Ángulos de paso. Ambas rutas ofrecen una vista encantadora de la ciudad y la oportunidad de descubrir tiendas y cafés a lo largo del camino. Alternativamente, puedes tomar un taxi si prefieres evitar la caminata.
Rutas y medios de transporte
Existen varias rutas y medios de transporte para llegar a la Plazoleta de San Blas. Si decides caminar, las calles Hatun Rumiyoc y Cuesta San Blas son las más directas. Para aquellos que prefieren el transporte público, existen buses y taxis disponibles en la Plaza de Armas que te llevarán directamente a San Blas. Los taxis son una opción económica y conveniente, especialmente si llevas equipaje o prefieres no caminar.
Consejos para tu visita
Para disfrutar plenamente de tu visita a la Plazoleta de San Blas, sigue estos consejos:
- Lleva una cámara para capturar la belleza del lugar.
- Visita las tiendas de artesanías para encontrar souvenirs únicos.
- Prueba la comida local en los restaurantes turísticos cercanos.
- Participa en talleres de arte para una experiencia interactiva.
- Planifica tu visita para evitar las horas pico y disfrutar de un ambiente más tranquilo.